LECTORES

'Carta de un lector'.
Adam Zagajewski.

En la casa nos pusimos a jugar al 'amigo secreto' durante una semana completa. Cuando hicimos el sorteo con los papelitos y evitaron entre todos a como de lugar que mi hermano y yo nos entreguemos los regalos al finalizar el 'experimento familiar', a mí me tocó darle un presente al papá de mi cuñada Rebe.

El misterio y la curiosidad llegaban a diario a mi vida cuando veía encima de mi almohada unos chocolates que me encantan, entre otras chucherías adictivas y llenas de azúcar porque no es desconocido para nadie en casa que todo lo que tiene que ver con dulces es mi debilidad... en primera instancia, pensé que se trataba de mi esposa, pero luego, me di cuenta de que sería muy evidente.

Mi hijo mayor sabe que leer es mi pasión, sabe que profundizar en temáticas que sean de mi total atención e interés cuando no estoy en el trabajo es parte de mí debido a un pasado que intensificó mucho más esas ganas, así que el día jueves en que debíamos entregarnos los regalos, él se puso frente a mí y colocó en mis manos una caja decorada junto con una carta muy especial, diciendo así que fue el responsable de tanto disparo diabético en mi habitación que por supuesto, no rechacé.

Le agradecí el gesto y cuando abrí mi obsequio, me sorprendió, pues eligió un detalle que valoro al infinito. Ya tengo varios libros del autor, pero para ser sincero, me faltaba justo el que él adquirió al ser mi amigo secreto... y como sabía que estaba por elegir una nueva obra para adentrarme en ella porque recientemente terminé 'Solenoide', del prosista rumano Mircea Cărtărescu en mis ciclos de reciclaje literario, mi hijo aprovechó la oportunidad.

_{Imagen propia. Libro Ziemia ognista de Adam Zagajewski.}

He estado leyendo este poemario de casi 80 páginas en mis ratos libres, ayer lunes lo terminé y como se lo prometí porque no me puedo negar a ciertas y miles de sus peticiones para mí, escribo ahora desde mi consultorio (porque se me presentó una emergencia), sobre uno de los poemas que más captó mi atención, aquel que transcribí del original y lo traduje al español: „List od czytelnika” (Carta de un lector).

Y sí....

Tal cual lo expresa en su libro de versos y aforismos llamado Ziemia ognista, el poeta y ensayista de origen polaco, Adam Zagajewski (específicamente en esta Carta de un lector), así muchas veces nos sentimos como lectores, pidiendo, solicitando temas nuevos, porque leer para entender, para aplicar, para sumergirse y trascender, no es una tarea que nos quede fácil como seres humanos y pensantes.

Como lectores conscientes, en miles de oportunidades pasamos el mismo proceso por el que atraviesa un escritor (nobel o profesional), el cual, debe crear armonías entre las atmósferas que utiliza y el juego carácter/personalidad/identidad/importancia de sus personajes, sean estos animados o inanimados.

Como lectores, somos también filtros, ojos que se convierten en jueces de un producto escrito que vamos a comprar, somos, en parte, la otra mitad del escritor y sus manjares, por eso, podemos, aunque no es una obligación imperante, demandar textos con sentido y a gusto personal, tal cual lo expresa el poema que transcribí en esta ocasión.

Como lectores, también podemos preguntarnos, no tanto, QUÉ LEER, sino CÓMO LEER sobre un tema en particular que nos llame la atención, un tema que nos edifique en vez de estresarnos, cuando el proceso sumergido en la Literatura no es una imposición, no es fatalidad, sino un beneficio y un plus al crecimiento integral.

Cuando estaba en el hospital como paciente, pasé muchos días sin comer por vía oral, todos los nutrientes eran intravenosos, los tiempos en que pasaba consciente, es decir despierto, sí sentía hambre, sin embargo, en una ocasión, recordé una enseñanza de mi papá acerca de esta percepción y necesidad que forma parte del ser humano e hizo que, a pesar de no poder alimentarme, quedara completamente saciado a través de los libros que empecé a solicitar, llevaran a mi habitación.

Se ha dicho mucho sobre los beneficios de la lectura, sea virtual o física, no hay entonces que desperdiciar la oportunidad cuando tenemos frente a nosotros un elixir que puede hacernos incluso madurar para poder afrontar situaciones complejas que requieren de un poder que no se basa en el dinero, sino en los argumentos que cosechamos al sembrar letras en la mente y en el corazón.

Me acabé todos los dulces que mi hijo me regaló durante la semana en que fue mi amigo secreto, pero un residuo me quedó impreso en hojas de papel, y sé, que no será la primera vez, ni la única, ni la última vez, que vuelva a comer de él para saciar mis 'ganas locas' de leer.

En fin...

No sé cuándo vuelva a pulsar las teclas porque no soy muy aparente para escribir, más me dedico a leerlos, a comentar, a 'reblutear' contenido que he leído en el día, sin embargo:

A quienes leyeron y también a quienes no, tengan un buen inicio de semana.

—Ezequiel.
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