Mientras transcurría el tiempo pensaba en ese último post que compartí por acá sobre la felicidad y como considero que es una decisión. Algo que además es particular de cada quién.

Lo que para mí es felicidad para otros, necesariamente no lo es. Por algo es que existe el libre albedrío ¿No? Por eso, es que justamente algunos nos pueden tildar de locos cuando ven como nos comportamos o las cosas que nos gustan, pero más allá de cualquier cuestionamiento lo importante es que somos felices ¿No creen? Aunque eso, como ya lo he mencionado no implica que no podamos estar tristes algunas veces. Yo creo que ese contraste es importante para notar la diferencia.

Estos temas de #newvisionlife son muy buenos. No se si algunos de ustedes en este camino lo considera. Porque en mi caso me hacen reflexionar, conocerme, y expresarme por este medio; lo cual constituye definitivamente un reto. Incluso mostrarme como soy constituye ese reto. y yo he decidido asumirlo.

En estos días entre tanto encierro y tanta reducción de movilidad por las condiciones de mi país, donde tu salario mensual se puede consumir en un desplazamiento ida y vuelta o en un pollo. Yo creo que además de reinventarnos, empoderarnos y lograr aplicar estrategias de supervivencia ante la crisis aguda; posiblemente, nos hemos aprendido a conocer más, a desarrollar otras habilidades y estrategias que no conocíamos y a sacar una fuerza que desconocíamos. Sé que no todos logran ese enfoque, pero en mi interior yo deseo que una gran mayoría lo haya logrado o esté en vías de hacerlo.

Hemos dejado de estar cómodos, la vida cambió significativamente, y ese tambaleo nos sacó de la comodidad e incluso nos permitió la posibilidad de disfrutar cada detalle, inclusive respirar.

De esta forma, seguramente cada uno de ustedes ha logrado hacer cambios en sus rutinas o en la disposición de las cosas en sus hogares para disfrutar de esas sensaciones de felicidad que nos producen las cosas cotidianas y sencillas. En mi caso, puedo mencionar las siguientes:

1.Tomarme un café rico en la mañana con tranquilidad mientras escucho Carlos Fraga, quién es uno de los terapeutas latinos que trabaja que trabaja con inteligencia emocional y tiene palabras muy directas sobre algunos temas. Por eso, me gusta, lo disfruto siempre es mi invitado a desayunar la veo en su canal de YouTube. Ese es uno de mis momentos felices.

1. Sentir la brisa fresca en la mañana cuando salgo a pasear a Fito mi hermoso y amado perrito.

2. También acostarme en la cama y sentir el pelaje de mi perrito en los pies eso me tranquiliza y me hace sentir bien. Abrazarlo y consentirlo.

3. Limpiar la casa completa empleando algún aromatizante que me guste, cambiar las sábanas, tomar una ducha y acostarme en las sábanas recién colocadas eso me da mucha felicidad.

4. Comer algo bien rico, un poco de chocolate, galletas con mermelada de mora o fresa, pie de limón ese me encanta. O incluso algo salado como maní u otra cosa en la que se mezclen sabores.

5. Ese momento al despertar, esa tranquilidad matutina cuando agradezco y siento que todo fluirá durante el día.

6. Ayudar a otras personas que lo necesiten me hace sentir bien.

7. Tomarme el tiempo para ver una serie o película con atención plena, sin pensar en lo que tengo que hacer, me da tranquilidad y felicidad.

También he notado que algunas otras cosas me hacen sentir bien y conectarme con ese bienestar que siempre estamos buscando. Como por ejemplo: el olor ají dulce, la sensación de caminar sobre la nieve o recodarla porque ahora estoy en el trópico, oler una guayaba fresca.

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