KURTIS LOV3 es un personaje que llevo tiempo trabajando y creando. Para crear sus imágenes normalmente lo describo similar a Kurt Cobain de Nirvana vestido con jeans desgastados y zapatos Converse Chuck Taylor viejos, a veces lleva una camiseta roja de la NBA o alguna t-shirt negra o sudadera negra, y siempre con unos lentes oscuros que no se quita ni para bañarse, jaja.

Dentro de otras características de KURTIS, es que es un músico hasta ahora sin éxito, que es muy perezoso y desordenado, y que además es un Don Juan que le gusta estar ligando con chicas de todo tipo.

He pensado que vive en un departamento de un barrio clase media baja, y que además tenga algunos amigos, compañeros de banda, y una novia o "amiga con derecho". Dentro de los amigos he pensado en alguno que físicamente se parezca a BUD SPENCER o algo así, jaja. Y bueno, muchas cosas por definir, pero que creo que puedo ir resolviendo sobre la marcha, ya que la idea es que las historias de este personaje sean cortas, divertidas y sin mucho sentido, que sea todo muy aleatorio, jaja.

En esta ocasión quise trabajar con GROK y juntos manejamos varias ideas para alguna historia entretenida con KURTIS. Entonces, de allí surgió la siguiente historia:

LIMPIEZA ROCKSTAR

KURTIS estaba profundamente sumido en un su quinto o sexto sueño, acurrucado en su sofá desvencijado que, si tuviera voz, probablemente le pediría un descanso de su peso. La habitación era una sinfonía visual de caos. Álbumes de rock legendarios se erigían como torres de Pisa, amenazando con derrumbarse sobre el primer incauto que se acercara. Afiches de bandas y de chicas Playmate cubrían las paredes, cada uno luchando por un pedazo de atención, mientras botellas de licor, algunas aún con un trago de olvido dentro, se esparcían como si hubieran tenido una fiesta propia. Colillas de cigarros llenaban los ceniceros o, más bien, cualquier superficie disponible, y la ropa, oh, la ropa, parecía haber escapado de una batalla campal, esparcida por doquier. En un rincón, lo que quedaba de una pizza de la noche anterior coqueteaba con la idea de convertirse en parte de la decoración permanente.

El teléfono de KURTIS, olvidado entre el caos, comenzó a sonar, una y otra vez, como si estuviera decidido a sacarlo del limbo onírico. Después de lo que parecía la séptima vez que repicaba, con bastante dificultad KURTIS emergió del mundo de los sueños, su voz aún marcada por la flojera.

—¿Qué? —contestó, con la elegancia de un oso despertando de su hibernación.

Era su novia LILA, con esa voz que podría despertar a un muerto, insistiendo en que quería verlo y proponiendo ir al cine. Entonces KURTIS, el rey del sofá, no estaba para esas aventuras.

—Eh, ¿y si vienes tú? —sugirió, con la esperanza de que su plan de mínimo esfuerzo funcionara.

Pero ella, con la perspicacia de quien conoce bien a KURTIS, le puso una condición que hizo que su mundo se tambaleara.

— Okey, pasaré a visitarte, pero solo si el departamento no está cochino —dijo con firmeza —me llamas cuando tu cueva esté impecable.

Con un suspiro que podría haber movido las nubes, KURTIS se levantó como si cada movimiento fuera un acto heroico. Agarró el primer cepillo para barrer que encontró, que parecía haber sido usado más como micrófono que como herramienta de limpieza, y una cubeta que, aunque llena de agua, tenía más historia que el Mar Muerto. Se quedó allí, en medio de su paraíso del desorden, con la mirada perdida.

"¿Por dónde empiezo?", pensó, con el mismo desconcierto que uno siente al intentar resolver un cubo de Rubik por primera vez.

KURTIS daba vueltas como un hámster en su rueda, intentando encontrar la chispa de inspiración para enfrentar el mar de desorden que lo rodeaba. Su cerebro, habitualmente una fábrica de melodías y letras subversivas, parecía haber decidido tomarse un descanso de su servicio. Pero entonces, como si se hubiera conectado a un enchufe de pura genialidad, una bombilla se encendió en su cabeza.

—¡Ya se! —gritó, como si hubiera descubierto la cura para la resaca eterna.

Comenzó su búsqueda frenética por el Santo Grial de la motivación: su viejo Boom Box, que en tiempos mejores había sido el corazón palpitante de sus noches más épicas. Encontrarlo fue como buscar una aguja en un pajar, solo que el pajar era su apartamento y la aguja, una reliquia de los 90 con más polvo que la momia de Tutankamón.

---

NIGHTCAFE STUDIO

Utiliza mi enlace de referidos para sumarte a NightCafe Studio y comenzar a generar imágenes y vídeos sin costo alguno:

https://creator.nightcafe.studio/?ru=mostrorobot

https://creator.nightcafe.studio/?ru=mostrorobot

---

Allí estaba, escondido bajo una montaña de revistas viejas de 'Rolling Stone' y una pila de camisetas que probablemente habían visto su último lavado en el siglo pasado. KURTIS lo desenterró con la delicadeza de un arqueólogo borracho, sacudiéndolo para liberar una nube de polvo que podría haber desencadenado una pequeña tormenta de arena en su sala.

—¡Vamos, pequeño, no me falles! —rogó mientras soplaba sobre los botones, como si fuera a resucitar un fósil.

El Boom Box, como un viejo amigo que necesita un poco de amor para volver a la vida, se resistió al principio. KURTIS, con la paciencia de un santo o de alguien con demasiado tiempo libre, comenzó a limpiarlo con lo primero que encontró: una camiseta de Guns N' Roses que ya había olvidado que tenía. Con un destornillador, que casualmente estaba junto a una pila de latas de cerveza vacías, abrió el compartimento y comenzó a ajustar lo que parecía ser un laberinto de cables y polvo.

Después de lo que pareció una eternidad, pero que en realidad fueron solo unos minutos de lucha, el Boom Box finalmente dio señales de vida. Una luz parpadeante, como un latido débil, iluminó el rostro de KURTIS con un brillo de esperanza.

—¡Sí, baby! —celebró, con la euforia de alguien que acaba de ganar la lotería de la procrastinación.

Ahora, la tarea era encontrar algo que alimentara ese resucitado pedazo de tecnología. Entre el caos, encontró una caja con viejos cassettes de Marilyn Manson, cada uno con etiquetas garabateadas y pegatinas que habían perdido su brillo pero no su esencia. Metió uno en el Boom Box, y con un crujido que podría haber sido tanto de las cintas como de su alma, la música comenzó a llenar la habitación.

"Mejor empezar con algo que refleje mi estado actual", pensó KURTIS con una sonrisa sarcástica, sabiendo que limpiar su apartamento con Manson sonando de fondo era lo más cercano a hacer una terapia de shock emocional.

Y así, rodeado de un desorden que ahora parecía bailar al ritmo de "The Beautiful People", KURTIS se preparó para la batalla de su vida, armado solo con un cepillo, una cubeta, y la convicción de que, con la música adecuada, hasta limpiar podía ser una forma de rebelión.

KURTIS se encontraba en su propio mundo, donde cada nota de aquellas rolas rockeras le recordaba viejas hazañas y noches de descontrol. No podía evitar retorcerse, moviéndose con un ritmo que solo él entendía, usando el cepillo como si fuera su pareja de baile en una fiesta de desorden. Cada canción era un viaje, y él, un guía turístico que no sabía para dónde iba, pero que disfrutaba cada paso perdido.

Canción tras canción, KURTIS se entregaba al ritmo, el cepillo giraba y se deslizaba por el aire más que por el suelo, creando más desorden que limpieza. Cuando el cassette llegó al fin de su vida útil, KURTIS, con el entusiasmo de un niño en una tienda de dulces, corrió hacia el Boom Box, lo abrió de un tirón y, con la habilidad de un DJ de una fiesta clandestina, le dio la vuelta al cassette para continuar la fiesta.

La música volvió a llenar el espacio, pero esta vez, KURTIS estaba tan metido en su propia performance que no escuchó el teléfono sonar. Era LILA, claro, quien probablemente ya había olvidado lo que significaba esperar una respuesta de KURTIS. Después de una hora de baile y "limpieza", cuando el teléfono sonó nuevamente, KURTIS, con la atención de un mosquito en un concierto, finalmente lo notó y soltó un "upppssss" que resonó en su apartamento como el eco de una mala decisión.

---

Para encargos de arts, diseños, conceptos, animaciones, edición de vídeos y másssss, puedes contactar a MOSTRO por acá en Telegram:

https://t.me/mostrorobot

https://t.me/mostrorobot

---

Miró su WhatsApp, donde LILA había dejado varios mensajes, cada uno más impaciente que el anterior, preguntando si ya había comenzado su transformación de "rey del caos" a "príncipe del orden". KURTIS, en lugar de responder, decidió que revisar otros mensajes era una prioridad más urgente. Sonrió con cada meme, cada chiste interno con sus amigos, y se sumergió en los canales de sus grupos de rock donde cada debate era más inútil que el anterior.

Una hora se convirtió en un parpadeo mientras él revisaba estados, perdía el tiempo en Instagram, y luego, como si el mundo se hubiera puesto de acuerdo para mantenerlo en su inercia, en TikTok. Cada video era un agujero negro de tiempo, y KURTIS, el viajero del tiempo del siglo XXI, se lanzó de cabeza a esa dimensión digital sin retorno.

Finalmente, con la gracia de un gato que se cae de un árbol, KURTIS se quedó dormido en su sofá, con el teléfono aún en la mano, un testigo mudo de su procrastinación. Otra hora pasó, y al despertar, se encontró con la realidad: no había limpiado nada. El desorden seguía allí, como un amigo fiel que nunca abandona, y KURTIS, con una sonrisa irónica, pensó en lo irónico de la situación: había limpiado su mente de cualquier responsabilidad, pero su apartamento seguía siendo un santuario al desorden.

"Bueno, al menos ahora tengo un plan B", murmuró para sí mismo, mirando alrededor con resignación, "decirle a LILA que estaba limpiando mi vida interior".

KURTIS, con la resignación de quien acepta que el caos es su verdadero amor, tomó su teléfono con la delicadeza de un minero que acaba de encontrar carbón en vez de diamantes. Marcó el número de LILA, preparándose para la batalla de excusas que estaba por venir.

El teléfono sonó, y LILA, probablemente con un pie en la puerta y otro en la paciencia, contestó.

—¡Hola! —dijo KURTIS, intentando que su voz sonara como la de alguien que acaba de correr un maratón de limpieza en lugar de una siesta digital—. ¿A qué hora es la película que veremos en el cine?

😅

FIN

---

Y bien, esta a sido la historia, me divertí mucho escribiéndola y viendo como reaccionaba GROK a mis solicitudes, y como luego yo iba corrigiendo y mejorando sus respuestas y adaptándolas mejor, jeje.

Espero que te haya gustado y que dejes tus opiniones, y si tienes ideas para otras aventuras de KURTIS LOV3 déjalo todo en los comments.

---

Las imágenes del post fueron realizadas por MOSTROROBOT utilizando herramientas como FLUX, Remixai, Leonardo, Playground, PicFinder, DreamByWombo, NightCafe Studio, Starryai, Copilot, Gemini y otros.

---

Instagram + Telegram + X + NightCafe

---

#636