Estimados lectores, en artículos anteriores hemos hablado sobre la bioseguridad de los animales bovinos, dentro del manejo sanitario uno de los procesos que se realizan a estos animales es la aplicación de vacunas para prevenir enfermedades como la brucelosis, anaplasmosis entre otras. Las vacunas según el instituto nacional de investigaciones agropecuarias son preparados biológicos que se administran en este caso a los animales para generar una reacción inmune en el organismo similar a la que provoca una infección natural con la intención de inmunizar al animal y que este no adquiera ninguna infección si tiene contacto con algún agente infeccioso.
En las unidades de producción, algunos ganaderos se preguntan por qué a pesar de vacunar a sus animales en ocasiones adquieren la enfermedad; para dar respuesta a esta inquietud se consultó a un profesional de la medicina veterinaria (Médico Veterinario Jáuregui), quien indicó que existe la posibilidad de que un animal no responda satisfactoriamente a la administración de una vacuna, debido a algunos factores que pueden afectar el desarrollo inmunológico del animal y por ende no brinde protección al animal ante algún brote de la enfermedad.
Teniendo en cuenta lo mencionado en el apartado anterior, a continuación se mencionarán algunos factores, que según algunos especialistas de la medicina veterinaria pueden afectar la efectividad de las vacunas.
El estrés puede influir en la respuesta de la vacuna en el animal, existen factores que pueden provocar estrés en el animal como por ejemplo, el hacinamiento, personal de granja que realiza el manejo de forma agresiva, factores ambientales entre otros, que provocan desequilibrio en su organismo que suprime la acción inmune de las vacunas.
Una nutrición inadecuada también puede influir en que el animal no responda positivamente a las vacunas y por lo tanto no responderá a la vacuna y no tendrá inmunidad a la enfermedad y el rendimiento productivo del animal también se verá afectado.
Las dosis del producto también influyen en una adecuada protección del animal, es decir, se debe cumplir con la recomendación de la vacuna suministrada evitando dosis menores y mayores, es allí donde se necesita personal calificado para cumplir con las recomendaciones del producto.
El acto de vacunación debe ser realizado por personal con suficiente destreza y conocimiento en el manejo de jeringas, para colocar eficientemente las vacunas y suministrar la dosis correcta de acuerdo al peso del animal.
Si las vacunas se compran con antelación, es importante que se almacenen y/o conserven según lo indicado por el fabricante.
Verificar que la vacuna no esté vencida, pues es muy probable que no contenga las propiedades antigénicas necesarias para generar inmunidad en el animal.
Estimados lectores, como han podido demostrar dentro del manejo sanitario del animal la vacunación es un proceso vital, pero se deben considerar algunos factores como los mencionados anteriormente, de ello depende que tengamos animales sanos que mantengan su vigor y productividad. Es importante que el médico veterinario realice o supervise el proceso de vacunación para verificar que el producto esté vigente, la vacuna se aplique de la forma correcta y se suministre la dosis adecuada.
Por otra parte, los médicos veterinarios señalan que los animales durante sus primeras semanas de vida reciben gran cantidad de anticuerpos de su madre a partir del calostro, que es la primera leche que produce la vaca cuando inicia la lactancia, por lo tanto, no recomiendan aplicar vacunas porque la alta cantidad de anticuerpos del calostro puede neutralizar las propiedades antigénicas de la vacuna.
El sector ganadero es muy complejo porque es necesario manejar eficientemente dos subsistemas es decir, se debe conocer el manejo agronómico para los cultivos forrajeros y también el manejo sanitario, el productor que mantenga estos aspectos en equilibrio podrá tener una empresa ganadera sustentable abordando oportunamente todos los aspectos que se han mencionado.
Gracias por leer el artículo, hasta una próxima entrega.
| Referencias bibliográficas |
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- Paranhos, M; Macedo, L y Schmidek (2015). Buenas prácticas de manejo, vacunación. Funep
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