La universidad que necesitamos para nuestro desarrollo

Estimados lectores, las universidades son la base para la transformación de los países, en estos espacios académicos se realiza un trabajo científico importante para el desarrollo de las naciones, dentro de sus espacios debe existir la libertad, el respeto y la solidaridad humana como una constante para que no se pierdan los valores y creencias, ya que son instituciones establecidas por las sociedades para el desarrollo de sus pueblos.

De la misma manera, la Universidad es un espacio de encuentro y participación en el que sus integrantes no sólo deben ser depositarios de conocimientos, sino también capaces de generarlos, además de transmitirlos. La Universidad que necesitamos para nuestro desarrollo tiene como eje vertebrador la investigación científica: por un lado, la promoción y adaptación del conocimiento académico a la vida real; por otro, la formación inicial y permanente de los estudiantes en ciencias sociales y humanas, así como en tecnologías que les permitan resolver los problemas del mundo actual. A partir de allí se configuran las preocupaciones que orientan nuestro accionar para abordar las cuestiones educativas relacionadas con la extensión universitaria, con un carácter práctico y social.

En la actualidad se necesita una universidad que responda a los retos del futuro, que descubra y aborde los problemas del desarrollo, que se abra a nuevas sinergias y garantice una educación de calidad en campos emergentes del conocimiento, una universidad basada en el conocimiento científico, económico, social y ambiental cuyo principal objetivo de desarrollo sea hacer mejores cosas para asegurar el bienestar de las generaciones futuras.

Para lograrlo se necesita una universidad con una enorme capacidad docente y de investigación al servicio de la sociedad en general, consciente de la demanda y necesidades sociales de su tiempo a través de la comprensión de las perspectivas de desarrollo del país, de esta conciencia puede surgir la capacidad de aportar soluciones a los planes de desarrollo en educación, ciencia y tecnología, derechos humanos, educación financiera, medio ambiente entre otros.

Para que tenga un impacto real en la sociedad, debe enfatizar en la investigación y la educación, así como en la prestación de servicios que beneficien a la sociedad; consideramos que debe hacerlo aprovechando el acervo que ya tenemos como excelentes investigadores, profesores y estudiantes que quieren aportar soluciones para el desarrollo de diferentes sectores, en el caso específico de la Universidad Nacional Experimental Sur del Lago de Maracaibo Venezuela, tiene un alto potencial para impulsar el desarrollo del sector agrícola de la región occidental del país, adaptándose a las demandas actuales a nivel mundial, que consiste en un desarrollo sostenible a través de alternativas agroecológicas que garanticen la producción minimizando el daño ambiental causado por las técnicas convencionales.

Por supuesto, si se quiere conocer cuáles son los problemas reales que aquejan a nuestras regiones, es necesario profundizar una alianza estratégica entre la universidad y la comunidad, sería la forma más efectiva de diagnosticar los fenómenos que las aquejan y que por supuesto están vinculados a las líneas de investigación establecidas en las instituciones. De no ser así, se debe estudiar la posibilidad de establecer nuevas líneas de investigación con personal calificado.

Estimados lectores, consideramos particularmente que se debe realizar una revisión curricular en las universidades para fortalecer las áreas de docencia, investigación, extensión, y además vincular a la universidad con otras organizaciones, tanto nacionales como internacionales, para fortalecer programas de calidad y pertinencia social. Por otro lado, es necesario que exista financiamiento para la investigación en la medida que ésta le permita a la universidad desempeñar mejor su papel como agente fundamental de crecimiento económico, social y académico; y a su vez implementar proyectos en las comunidades con el propósito de elevar la calidad de vida de sus habitantes y con ello contribuir al desarrollo local.

El aula universitaria es para formar a quienes desarrollarán alternativas para la solución de los problemas que existen en las comunidades, y por eso se deben romper los muros que impiden esa interacción, crear un sistema educativo que forme ciudadanos críticos, capaces de aportar soluciones a los problemas de la población y por ende del país y no ser piedra de tropiezo para la transformación y el cambio de una sociedad digna. Si no, lamentablemente seremos parte de instituciones universitarias fantasmas.