Los agricultores a nivel mundial han estado buscando alternativas de cómo cubrir los requerimientos de los cultivos, pues lo han hecho por muchas décadas a través de prácticas convencionales o tradicionales, es decir basadas en la implementación de paquetes tecnológicos y el uso de agroquímicos con el fin de mejorar las condiciones de los cultivos, estas labores dieron buenos resultados a mediano plazo, pero al mismo tiempo comenzaron a ocasionar problemas en el ecosistema productivo por los efectos nocivos de los agrotóxicos y la degradación de los suelos provocando de esta manera perturbar el equilibrio ecológico de los agroecosistemas -y consecuentemente afectar el crecimiento de las plantas así como la producción de sus frutos.
En este sentido, a medida que pasaron los años, el hombre comenzó a notar los graves problemas que se estaban presentando en el agroecosistema y por ende en los cultivos, por ello se ha planteado la búsqueda de alternativas para mejorar la agricultura, una es incorporar de forma natural todos los nutrientes que necesita el suelo para su fertilidad, cabe señalar, las prácticas de fertilización deben garantizar la fuente de suministro de nutrientes en donde se distinguen dos alternativas para la fertilización de los cultivos es decir las enmiendas químicas o sintéticas y las agroecológicas.
En este mismo orden de ideas, lo antes mencionado busca que los agricultores utilicen productos orgánicos en sus sistemas de producción y a través de estos comiencen a recuperar la fertilidad, biodiversidad y estructura natural de los suelos utilizando materiales endógenos y comiencen a disminuir progresivamente el uso de fertilizantes químicos.
La materia orgánica más utilizada por los agricultores y en la jardinería es el estiércol de ganado, que puede mejorar la fertilidad del suelo porque se reciclaría un porcentaje de los nutrientes que obtienen los animales de los forrajes, lo que repercute directamente en el rendimiento de los cultivos. Algunos investigadores señalan que el estiércol contiene tres de los nutrientes esenciales: nitrógeno, fósforo y potasio; así como materias orgánicas que benefician la calidad del suelo al mismo tiempo que alimentan a las plantas.
Por esta razón se han buscado alternativas para obtener un fertilizante líquido utilizando estiércol sólido a través de una preparación cuyo proceso es hacer una especie de té, ya que se coloca el estiércol en una bolsa y se introduce en un recipiente plástico con agua y la bolsa se mueve diariamente como una especie de bolsita de té, con esto se busca que el estiércol libere sus nutrientes en el agua y así queden disponibles para las plantas.
Los materiales que se pueden utilizar para elaborar este abono son los siguientes: envase plástico para 200 litros de capacidad, costal, estiércol de bovino, plátano rallado, hojas, melaza, leche entre otros materiales. Su elaboración es la siguiente: se introduce el estiércol en el saco, se le agrega el plátano rallado, las hojas de legumbre y además una piedra de aproximadamente 4 kg para ayudar a mantener el saco sumergido mientras no se mueva, luego se amarra el saco y se introduce en el saco dejando un trozo de cuerda por fuera del mismo, como si fuera una bolsita grande de té, se llena el envase con agua limpia y al agua se le agrega la melaza y la leche, después de dos semanas de fermentación aeróbica ya está listo el té de estiércol, se procede a abrir y extraer el saco del envase apretándolo para que salga todo el líquido, el líquido que queda en el envase es el té de estiércol listo para ser aplicado.
Luego de envasado el producto y resguardado en un lugar fresco y sombreado, se puede iniciar la aplicación diluyéndolo en agua, por ejemplo, con una proporción de 50/50 es decir, en una bomba aspersora de 20 litros se pueden aplicar 10 litros de té de estiércol y 10 litros de agua, la frecuencia de aplicación puede variar, sería importante realizar pruebas con diferentes cultivos en suelo. Algunas investigaciones indican que en cultivos de ciclo corto la dosis aplicada con una bomba aspersora de 20 litros es de 5 litros de té y 15 litros de agua. Por otro lado, Estrada (2010), señala que es más recomendable utilizarlo durante la temporada de crecimiento de las plantas, ya que en esta etapa las plantas tienen la capacidad de absorber el 50% de las sustancias nutritivas del té.
Gracias por leer nuestro artículo, esperamos que sea de utilidad para todos los amantes de la agricultura.
Referencias bibliográficas |
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- Estrada, E.( 2010). Manual técnico agrícola: Preparación de abonos orgánicos sólidos y líquidos. 1a ed. Quetzaltenango, Guatemala. q 22.
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