The Girl from the Lake is a 2007 dramatic thriller film directed by Andrea Molaio, starring Toni Servillo and Valeria Golino.
The debutant Andrea Molaioli, for years a trusted assistant director to Nanni Moretti (but also to Luchetti, Mazzacurati and Calopresti), manages to bend a wide range of ambitions to the classic canons of the detective story (murder/unknown culprit/investigation/case resolution): from a Lynchian aesthetic that pervades the first scenes, in which the walnut trees of Carnia for a moment bring to mind the paths of Twin Peaks, to the idea of horror behind the monotony already dear to noir writers like Simenon and Dürrenmatt, from the fairy-tale tone of the incipit (the little girl and the ogre, the legend of the lake serpent) to a livid and rarefied visual style, not far from that of the best Garrone ("The Embalmer"). What is detrimental, if anything, is a certain excess of virtuosity (camera movements, fades, geometric lines) which, especially in the first part, winks a little too openly at Sorrentino's cinema.
La chica del lago es una excelente película de suspenso dramático dirigida por Andrea Molaioli
La chica del lago es una película de suspenso dramático de 2007 dirigida por liAndrea Molaio, protagonizada por Toni Servillo y Valeria Golino.
El debutante Andrea Molaioli, durante años asistente de dirección de confianza de Nanni Moretti (pero también de Luchetti, Mazzacurati y Calopresti), consigue adaptar una amplia gama de thrillers a los cánones clásicos del thriller (asesinato/culpable desconocido/investigación/resolución del crimen). el caso). ambiciones: desde una estética lynchiana que impregna las primeras escenas, en las que los nogales de Carnia recuerdan por un momento los caminos de Twin Peaks, hasta la idea del horror detrás de la monotonía ya querida por los escritores negros. como Simenon y Dürrenmatt, desde el tono de cuento de hadas del incipit (la niña y el ogro, la leyenda de la serpiente del lago) hasta un corte visual lívido y enrarecido, no muy alejado del del mejor Garrone ("L'imbalsamatore "). Lo que resulta perjudicial, en todo caso, es un cierto exceso de virtuosismo (movimientos de cámara, fundidos, líneas geométricas) que, sobre todo en la primera parte, hace un guiño demasiado abierto al cine de Sorrentino.
A young woman, drowned in a lake in the province of Friuli, appears naked on the shore. Inspector Giovanni Sanzio, Francesca's rough and introverted father, investigates the mysterious death of Anna, a student and hockey player. Suffering from atypical dermatitis and forgotten by his wife, who suffers from a degenerative disease of the nervous system, Sanzio searches with methodical passion for the public reasons for the crime and the private reasons for his life. Pursuing an investigative and existential investigation, he will discover the murderer and the principle of order in the perverse disorder of murder.
It has been said before but it is worth repeating. There is disconcerting fiction cinema and reality cinema, not necessarily in forms of realism. Andrea Molaioli's first work belongs to the second category, which already includes enlightening and enlightening followers: Marra, Garrone, Sorrentino, Gaglianone. It is clear that the two approaches cannot be combined: the first is entertainment, the second is critical reflection, it is cinema that anticipates and criticises existence.
Based on the novel by the Norwegian Karin Fossum and with a script by the "unrelated" Petraglia, Molaioli's film borrows the fjords of the Carnia lakes, proposing in the form of a detective story themes normally discarded by comforting fiction. Above a cinema that promotes fragments of priceless happiness, The Girl from the Lake stands out and makes a difference.
Trying genre cinema, the Roman director makes a film about contemporary Italy, about the province that is homologated both in the north and in the south. In Friuli, reborn from the rubble of the landslide earthquakes typical of karst terrain, many characters remain buried, equally guilty and equally innocent, characters who have some shortcomings, to whom something has happened that prevents them from being fully.
Their difficulties are not those of the bourgeois middle class (adultery, midlife crisis, economic ambitions), because Molaioli is not interested in the sociological or statistical approach to things. The director works by "removing", eliminating informative data and everything that would have made the story scandalous. In the end, what remains is the story of unbearable pain, formalized in the narrative and stylistic conventions of the genre. The closer the film gets to the deep and eternal dynamics of human relationships, the more it succeeds in establishing the background, the cover, the everyday fact.
The Girl from the Lake also reveals a work of knowledge and preparation carried out in close contact with the actors. Above all, the hysterical performances of Toni Servillo, capable of coping with all genres, masks and registers, and of Fabrizio Gifuni, too often confined to roles unworthy of his talent, who possesses the refinement of absolute simplicity.
Una joven, ahogada en un lago de la provincia de Friuli, aparece desnuda en la orilla. El inspector Giovanni Sanzio, el rudo e introvertido padre de Francesca, investiga la misteriosa muerte de Anna, estudiante y jugadora de hockey. Aquejado de una dermatitis atípica y olvidado por su esposa, que padece una enfermedad degenerativa del sistema nervioso, Sanzio busca con pasión metódica las razones públicas del crimen y las razones privadas de su vida. Prosiguiendo una investigación investigativa y existencial, descubrirá al asesino y el principio de orden en el perverso trastorno del asesinato.
Se ha dicho antes pero vale la pena repetirlo. Hay cine de ficción desconcertante y cine de realidad, no necesariamente en formas de realismo. La primera obra de Andrea Molaioli pertenece a la segunda categoría, que ya incluye seguidores ilustrados y esclarecedores: Marra, Garrone, Sorrentino, Gaglianone. Está claro que los dos enfoques no pueden combinarse: el primero es el entretenimiento, el segundo es la reflexión crítica, es el cine que anticipa y critica la existencia.
Basada en la novela de la noruega Karin Fossum y con guión de la "no relacionada" Petraglia, la película de Molaioli toma prestados los fiordos de los lagos de Carnia, proponiendo en forma de historia policíaca temas normalmente descartados por la ficción reconfortante. Por encima de un cine que promueve fragmentos de felicidad impagable, La chica del lago se impone y marca la diferencia.
Probando el cine de género, el director romano realiza una película sobre la Italia actual, sobre la provincia homologada tanto al norte como al sur. En el Friuli renacido de los escombros de los terremotos de derrumbe, propios de los terrenos kársticos, permanecen enterrados muchos personajes, igualmente culpables e igualmente inocentes, personajes que tienen alguna carencia, a los que les ha sucedido algo que les impide ser plenamente.
Sus dificultades no son las de la clase media burguesa (adulterio, crisis de la mediana edad, ambiciones económicas), porque a Molaioli no le interesa el enfoque sociológico o estadístico de las cosas. El director trabaja "quitando", eliminando datos informativos y todo lo que hubiera hecho que la historia fuera escandalosa. Al final, lo que queda es la historia de un dolor insoportable, formalizada en las convenciones narrativas y estilísticas del género. Cuanto más se acerca la película a la dinámica profunda y eterna de las relaciones humanas, más logra establecer el trasfondo, la cobertura, el hecho cotidiano.
La chica del lago también revela un trabajo de conocimiento y preparación realizado en estrecho contacto con los actores. Sobre todo, las interpretaciones sin histeria de Toni Servillo, capaz de medirse con todos los géneros, máscaras y registros, y de Fabrizio Gifuni, confinado con demasiada frecuencia a papeles indignos de su talento, que posee el refinamiento de la absoluta sencillez.
Toni Servillo: Giovanni Sanzio
Valeria Golino: Chiara Canali
Fabrizio Gifuni: Corrado Canali
Anna Bonaiuto: Sanzio's wife
Omero Antonutti: Mario's father
Marco Baliani: Davide Nadal
Denis Fasolo: Roberto
Sara D'Amario: Doctor Giani
Franco Ravera: Mario
Giulia Michelini: Francesca
Nello Mascia: Alfredo
Fausto Maria Sciarappa: Inspector Lorenzo Siboldi
Daniele Griggio: Forensic Doctor
Heidi Caldart: Silvia Nadal
Alessia Piovan: Anna Nadal
Nicole Perrone: Marta
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