Mi vida ha transcurrido en el mundo científico desde que me decidí por estudiar ciencias en la universidad. Seleccioné la química como carrera. En la universidad donde estudie, la Universidad Central de Venezuela, teníamos la opción de elegir entre tecnología, química básica y geoquímica. Mi selección definió mi vida. La verdad me encanta mi trabajo en ciencias ambientales. Yo considero que mi propósito es compartir el conocimiento con todos, sobre todo con la sociedad civil, puesto que los temas de contaminación no solo afectan el ambiente, sino a nosotros mismos.

Debido a esto, siempre que he tenido la oportunidad de viajar a la capital de Venezuela en Caracas, paso por la facultad de ciencias a saludar a mis conocidos y a conversar con algunos profesores amigos. En esa oportunidad pudimos juntarnos estas cuatro mujeres. Luego que di una conferencia sobre microplásticos. La verdad lo disfruté mucho. Como siempre nos reímos y tratamos de ver en que podríamos trabajar juntas. Lamentablemente, la situación en mi país, no contamos con recursos suficientes para desarrollar las investigaciones que deseamos porque conocimientos y ganas no son suficientes. Deseo que emerjan los medios y los recursos para seguir investigando y llevando el conocimiento de alta calidad. Soñar y desear es gratis, así que lanzo mis deseos al viento esperando a que se materialicen para que estas mujeres empoderadas de las ciencias podamos seguir en pie y dando lo mejor de nosotras.

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