Como venezolano viviendo en Colombia puedo decir muchas cosas, ser migrante tiene sus matices, es la realidad, y no sigo que sea algo malo del todo, porque sé bien que tanto los amigos colombianos así como los venezolanos terminamos por aprender los unos de los otros.
Cada cultura tiene su particularidad, no creo que sea una mejor que la otra, todo depende del cristal con el que se mire, por supuesto, esto aplica totalmente a esto que comento. Las diferencias son las que nos permiten valorar lo que tenemos o lo que dejamos de tener, sabemos que algo es mejor o peor sencillamente por que conocimos algo diferente a lo actual, y tenemos ese punto de comparación.
Siento que muchas personas pueden pensar que son mejores que otras sólo por tener una nacionalidad distinta, en parte se generaliza esa creencia, de alguna manera se impone, y llega un momento en el que de tanto decirlo, leerlo y verlo, se termina por asumir como algo 100% real, cuando muchas veces está lejos de la realidad.
Por ejemplo, gracias a un gran efecto mediático, se cree que los ciudadanos estadounidenses son mejores que los de todo el mundo, en muchos aspectos. A ver, he conocido a muchas personas de nacionalidad estadounidense, y puedo decir sin temor a equivocarme que son tan iguales que yo, sólo que hablan ingles, obviamente, es su idioma natal, pero no por estos son mejores.
Hablan de los mismos temas, tienen las mismas preocupaciones que otras personas de cualquier lado del mundo, por lo tanto, no son mejores ni peores, son un ciudadano más de este mundo, al igual que yo, tu y cualquier otra personas de África, Asia, etc.
Pero sin establecer puntos de comparación ni tampoco de diferenciación, porque creo que al final todos somos humanos en un mundo que no le pertenece a nadie, o quizás si, le pertenece a cada uno de nosotros los que en el vivimos, es importante valorar las diferencias tanto como las similitudes.
Lo principal es que podamos respetar lo que nos diferencia, valorar adecuadamente cada cosa, y saber que lo nuevo nos dará esa posibilidad de mejorar lo que tenemos, lo que teníamos y lo que hacíamos, o sencillamente extrañarlo, también está dentro de las posibilidades, lo importante es que sepamos que diferencias siempre existirán, y son necesarias incluso, por esta misma razón de que los contrastes son necesarios, por eso tenemos tal diversidad de especies vivientes.
Valorar de manera objetiva sólo es posible estableciendo puntos de comparación que nos permitan ver las diferencias, esas que nos hacen únicos, y que nos hacen lo que somos.