Children's story: The fish and the boy|Cuento infantil:El pez y elniño.

in blurtliterature •  4 years ago 

image.png

Mis fuerzas desfallecían progresivamente, abría mi boca desesperadamente clamando por oxígeno, el calor del sol y la ardiente temperatura de la arena contribuían sin quererlo, a acelerar mi muerte.

El descuido de un pescador, al levantar la red, me dejó abandonado a escasos metros del oleaje, que ferozmente me tiraba aguas afuera, hacia la playa, allí quedé varado, resignado a morir, entregado a la voluntad del calor abrasador y a ser aplastado por los pies de algún bañista, o peor aún, a ser despedazado por los pelícanos y gaviotas del Báltico Salvaje.

Mis amigos seguramente, corrieron con una suerte más funesta, serían despojados de sus vísceras y branquias para ser lanzados a una piscina de aceite hirviendo, y luego servidos como un trofeo en el plato de algún concurrido restaurante.

Acostado boca arriba, jadeante, imploraba por una burbuja de oxígeno, cuando de reojo, pude divisar la figura de un niño de aproximadamente nueve años que se acercaba velozmente hacia mí, traía en su mano una moderna pistola de agua, de vivos colores; seguramente me aplastaría la cabeza con ella. Eso fue primero que pensé, que vendría a acelerar mi muerte, dándome la estocada final.

De pronto, las circunstancias cambiaron a mi favor, y mis esperanzas de vivir cobraron nuevas expectativas en medio de mi agonía; escuché el sollozar del niño, me tomó entre sus manos y le oí decir suplicante:

_¡Vamos pecesito, no mueras! - mi cuerpo convulsionaba, ya no daba más, estaba deshidratado y mis escamas estaban secas como papel, lucían grises y necróticas. Activó la pistola de agua y me lanzaba pequeños chorros para reanimarme, pero no lo consiguió.

Acto seguido, comenzaron a caer tibias gotas de agua salina bañando mi cuerpo, era como un menuda llovizna que me iba bañando el alma y recomponiendo cada fragmento de mi desintegrado anatomía.

El agua que que me devolvió la vida, eran las lágrimas del niño que lloraba de dolor al verme indefenso y a punto de fallecer, sus palabra me reanimaban mientras me conducía de nuevo al océano, fui cobrando el aliento poco a poco hasta reponer mis fuerzas por completo.

Pero el lugar a donde me depositó, no resultaba familiar para mí, al menos en su superficie, en ella flotaba, una esfera de color blanco con líneas transversales de un límpido azul eléctrico; éstas atravesaban el radio de la esfera a lo ancho de su redondez.

En medio del oasis, una orca mayor juguetea alrededor, y más allá, podía divisar una construcción de color verde esmeralda intenso, eran como domos alineados en forma creciente, que engranaban unos poliedros más pequeños, parecidos a una oruga gigante.

Luego supe por las redes de noticias intramarinas, que era la estructura de un banco confederado donde se guardan las arcas de la de la tecnología de bloques blockchain, una prominente plataforma grande como este mar, que es mi hogar, donde también navegan pecesitos, o pequeños inversores de la criptomoneda a través de una gran red, apadrinada por ballenas o grandes inversores, que son el soporte financiero más grande de la cadena blockchine.

Y bien, lo cierto es que estoy vivo, gracias a las lágrimas milagrosas de un humano compasivo.

Recién descubro además, que mi hogar en el fondo del mar está construido justo de este gran ecosistema financiero.

Quizás en un futuro no tan lejano, nosotros los pecesillos podamos hacer también nuestra pequeña inversión y formar parte de esa increíble plataforma cripto financiera.

English
My forces progressively fainted, I opened my mouth desperately crying for oxygen, the heat of the sun and the burning temperature of the sand contributed unwittingly, to accelerate my death.

The carelessness of a fisherman, when lifting the net, left me abandoned a few meters from the waves, which fiercely threw me out to the beach, there I was stranded, resigned to die, delivered to the will of the scorching heat and to be crushed by the feet of a swimmer, or worse, to be torn apart by the pelicans and seagulls of the Wild Baltic.

My friends surely, ran with a more dire fate, would be stripped of their viscera and gills to be thrown into a pool of boiling oil, and then served as a trophy on the plate of a busy restaurant.

Lying on his back, panting, he implored by an oxygen bubble, when, sideways, I could see the figure of a child of approximately nine years who was approaching rapidly towards me, he was carrying in his hand a modern water gun, of vivid colors; I would surely crush my head with her. That was first that I thought, that it would come to accelerate my death, giving me the final thrust.

De pronto, las circunstancias cambiaron a mi favor, y mis esperanzas de vivir cobraron nuevas expectativas en medio de mi agonía; escuché el sollozar del niño, me tomó entre sus manos y le oí decir suplicante:

_Come on little fish, don't die! - My body convulsed, I didn't give it anymore, I was dehydrated and my scales were dry as paper, they looked gray and necrotic. He activated the water gun and threw me small jets to revive me, but he did not succeed.

Then, warm drops of saline water began to fall bathing my body, it was like a small drizzle that was bathing my soul and recomposing every fragment of my disintegrated anatomy.

The water that brought me back to life, were the tears of the child who cried in pain when he saw me helpless and about to die, his words revived me as he led me back to the ocean, I was slowly catching my breath until I regained my strength for full.

But the place where he deposited me was not familiar to me, at least on its surface, it floated on it, a white sphere with transverse lines of a limpid electric blue; these crossed the radius of the sphere across its roundness.

In the middle of the oasis, a major killer whale plays around, and beyond, he could see an intense emerald green construction, they were like domes lined up in an increasing fashion, which were geared towards smaller polyhedral, similar to a giant caterpillar.

Then I learned from the intramarine news networks, which was the structure of a Confederate bank where the coffers of blockchaine block technology are kept, a prominent large platform like this sea, which is my home, where little fish also sail, or Small crypto currency investors through a large network, sponsored by whales or large investors, which are the largest financial support of the blockchaine chain.
Well, the truth is that I am alive, thanks to the miraculous tears of a compassionate human.

I have also recently discovered that my home at the bottom of the sea is built right from this great financial ecosystem.

Perhaps in the not-so-distant future, we fishes can also make our small investment and be part of that incredible financial crypto platform.

Así llegamos al final de esta historia, que bien pudiera continuar en historias subsiguientes
Thus we come to the end of this story, which could well continue in subsequent stories

Thanks for coming - Gracias por venir

Authors get paid when people like you upvote their post.
If you enjoyed what you read here, create your account today and start earning FREE BLURT!