Un día a la vez

Imagen de Pixabay Fuente

Cada vez que despertamos antes de decir un gracias viene a la mente la lista de actividades que se debe cumplir para decir que somos exitosos o sea lo que sea cumplimos las metas.

Ese día cargado trae complicaciones, porque dentro de todo hay mucho en juego...cumplir expectativas de otros para quedar bien o ganar puntos dentro de nuestro entorno o con las personas que nos rodean.

Hoy más que nunca se lee acerca de la ansiedad, cada día más personas se identifican con este concepto y hasta los más jóvenes forman parte de la lista que crece cada día; alejándose de redes sociales por salud y otras cosas.

Vivimos en una sociedad tan meticulosa, y sin darnos cuenta allí nos vemos que queremos estar a la par de otros, porque él lo consiguió, yo no; al ver que otros son veloces queremos serlo también. A esto se suma las comparaciones en edad, en preparación, es relaciones sociales, nos llenamos de tantas cosas olvidando nuestra esencia sin de pensar que cada quien es único e irrepetible , cada uno va a su ritmo...esto de cada uno va a su ritmo es poco aplicado.

Imagen de Pixabay Fuente

Es poco aplicado porque queremos que todos los humanos de 7 años aprendan lo mismo y se comporten igual antes las situaciones diarias, igual ocurre en adolescentes, en los estudios, en los trabajos. En fin terminamos como se lee en las redes sociales en angustia, en agonía, en ansiedad.

Un día a la vez es esencial entenderlo y aplicarlo...lo no se cubrió hoy mañana se sigue.

Son muchos los momentos diarios que se viven en un día , por eso se debe evaluar o clasificar lo que se puede hacer en un día para no generar angustias y las expectativas de otros que queden en el espacio.