Mis recuerdos deportivos: toda una vida disfrutando del juego

Desde que tengo memoria siempre he tenido afinidad por los deportes, podría decir que desde los 8 años recuerdo reunirme con mis amigos para jugar a la pelota de goma, así le llamamos en mi país Venezuela a un juego que se parece al beisbol con la única diferencia es que usas una pelota de hule que golpeas con la mano y la puedes jugar con tantos jugadores como quieras, de la misma manera corres alrededor de las tres bases y anotas carreras, generalmente jugaba en la calle y tenía que detener el juego cuando se acercaba un vehículo, son momentos inolvidables para mí.

De la misma manera, jugábamos béisbol como todos saben es el deporte rey de Venezuela, íbamos al estadio más cercano y jugábamos una caimanera (forma de llamar a un juego entre amigos) con niños de otros sectores cercanos al nuestro, generalmente yo jugaba en los jardines, debo reconocer que era muy bueno atrapando ya que tenia mucha agilidad para llegar a las pelotas elevadas, pero a la hora de batear no lo hacia muy bien, en pocas palabras lo bueno que hacia en atrapar resolvió mi deficiencia como bateador.

Cuando llegué a mi juventud a la edad de 11 o 12 años, comencé a crecer un poco rápido llegando a una altura promedio de 1.82 metros, cuando ingresé a la escuela secundaria, observé que se estaban realizando campeonatos de voleibol, el entrenador me dijo que si yo quería ser parte del equipo de voleibol, a lo que respondí un rotundo sí, a partir de ahí comencé a asistir a las prácticas y desarrollé grandes habilidades, lo que me permitió ser parte del equipo de mi municipio por un corto tiempo. Considero que el voleibol es un deporte donde prima la técnica, es ahí donde radica el éxito de un jugador, aparte de su desarrollo atlético por supuesto y si no tienes una altura adecuada debes trabajar en poder adquirir un gran salto para los ataques y la defensa son más efectivos.

Asimismo, desarrollé afinidad por el baloncesto, deporte que me ha marcado hasta el día de hoy. Me gusta la sinergia que existe entre lo físico, lo táctico, lo colectivo, el liderazgo y la disciplina de este deporte, lo cual hablo muy acertadamente con mi experiencia como jugador en mi equipo universitario cuando era estudiante y ahora como profesor.

Cuando comencé a jugar al baloncesto, recuerdo grabar los partidos, para ver los movimientos de quien para mí es el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos, seguro que saben de quién hablo, por supuesto, Michael Jordan, además de excelentes jugadores como Kevin Garnet, Kobe Bryant y luego un poco después las espectaculares jugadas de Vince Carter y Jason Williams, en la actualidad me gusta la serenidad y eficacia con la que juega Kevin Durant.

En la universidad tuve la oportunidad de jugar en los juegos nacionales juveniles de universidades, claro que mi estatura 1.84 metros no me favorecía, pero se hizo el esfuerzo de jugar de alero derecho y en ocasiones como escolta. Hoy a mis 40 años sigo jugando baloncesto en mi Universidad para el equipo de profesores, equipo que tuve la oportunidad de impulsar y estaba integrado por profesores jóvenes y no tan jóvenes, tuvimos la oportunidad de ir a los juegos nacionales de profesores en la Isla de Margarita por tres años consecutivos, los dos primeros años fueron de aprendizaje y luego en el tercer año gracias a mucha disciplina y dedicación logramos llegar a semifinales lo cual para nosotros es significativo, tomando en cuenta que otras universidades incluyeron estudiantes y algunos incluso jugaban en la liga profesional, así que se pueden imaginar.

Estimados lectores, sin duda alguna estas son experiencias deportivas que nunca se olvidan y quete permiten crear disciplina y perseverancia cuando se desea conseguir la victoria deportiva.