Hello everyone!
It's SpectraXP
It feels like forever since I've had time to post. hopefully I should be a bit more frequent from now. Decided to try out those large crayons and colour. Funny enough the paper already had the lines marking on it were the scars are so I just stylized them to form a scar. Then I remembered the "scars to your beautiful" song by Alessia Cara . As usual I draw art with a story so Inspired the short character bio on drawing talks more about confidence in your beauty and what you can offer despite literal scars.
¡Hola a todos!
es SpectraXP
Se siente como una eternidad desde que tuve tiempo de publicar. Espero que debería ser un poco más frecuente a partir de ahora. Decidió probar esos crayones grandes y color. Curiosamente, el papel ya tenía las líneas marcadas donde estaban las cicatrices, así que simplemente las estilicé para formar una cicatriz. Entonces me acordé de la canción "Cicatrices a tu bella" de Alessia Cara. Como de costumbre, dibujo arte con una historia, así que Inspirado, la breve biografía del personaje sobre el dibujo habla más sobre la confianza en tu belleza y lo que puedes ofrecer a pesar de las cicatrices literales.
Short bio
In a small village, there lived a young girl named Lily. She had a captivating smile that could light up any room, but behind her cheerful facade, she carried scars that told a tale of resilience and strength.
Lily's scars were not just physical; they were emotional too. When she was very young, a tragic accident had left her with burn marks on her arms and face. The scars served as a constant reminder of the pain she had endured, but they also reminded her of her incredible journey towards self-acceptance.
Despite her scars, Lily was determined to live her life to the fullest. She refused to let her physical appearance define her worth. She possessed an unwavering spirit that inspired those around her.
Lily had a passion for painting, and through her artwork, she found solace and healing. With every brushstroke, she poured her heart onto the canvas, creating vivid landscapes that mirrored her inner strength. Each stroke was a declaration of her resilience, a testament to her ability to rise above her scars.
As time passed, news of Lily's incredible talent spread far and wide. People from neighboring villages and even distant cities flocked to see her artwork. They were captivated by the raw emotions that emanated from her paintings, each stroke reflecting the battles she had fought and the triumphs she had achieved.
Lily's scars became a symbol of hope and inspiration for others who faced their own hardships. They saw her as a living testament to the fact that scars do not define a person; it is their spirit and resilience that truly matter.
One day, a renowned art gallery in the city invited Lily to showcase her work in a grand exhibition. It was a dream come true for her. As she stood in front of her paintings, she felt a surge of emotions. She saw people moved to tears, their hearts touched by her story of overcoming adversity.
In that moment, Lily realized that her scars were not a burden but a gift—a unique mark that set her apart and made her journey even more powerful. She understood that her purpose was not only to create beautiful art but also to inspire others to embrace their own scars and find beauty within their imperfections.
From that day forward, Lily continued to paint and share her story with the world. She traveled to schools, hospitals, and community centers, spreading a message of resilience and self-acceptance. Her scars were no longer a source of pain; they were a source of strength and connection.
Lily's journey touched countless lives, reminding people that scars tell stories of survival and courage. And as she smiled, with her scars proudly displayed, she knew that she had found her true purpose—to be a beacon of hope for anyone who had scars, both seen and unseen.
Historia corta
En un pequeño pueblo, vivía una joven llamada Lily. Tenía una sonrisa cautivadora que podía iluminar cualquier habitación, pero detrás de su fachada alegre, llevaba cicatrices que contaban una historia de resistencia y fuerza.
Las cicatrices de Lily no eran solo físicas; ellos también eran emocionales. Cuando era muy joven, un trágico accidente la había dejado con marcas de quemaduras en los brazos y la cara. Las cicatrices sirvieron como un recordatorio constante del dolor que había soportado, pero también le recordaron su increíble viaje hacia la autoaceptación.
A pesar de sus cicatrices, Lily estaba decidida a vivir su vida al máximo. Se negó a dejar que su apariencia física definiera su valor. Poseía un espíritu inquebrantable que inspiró a los que la rodeaban.
Lily tenía pasión por pintar, y a través de su obra de arte, encontró consuelo y curación. Con cada brushstroke, vertió su corazón sobre el lienzo, creando paisajes vívidos que reflejaron su fuerza interior. Cada golpe fue una declaración de su resiliencia, un testimonio de su capacidad de elevarse por encima de sus cicatrices.
A medida que pasaba el tiempo, la noticia del increíble talento de Lily se extendía lejos y ancho. Personas de pueblos vecinos e incluso ciudades distantes se encerraron para ver su obra de arte. Estaban cautivados por las emociones crudas que emanaban de sus pinturas, cada golpe que reflejaba las batallas que había luchado y los triunfos que había logrado.
Las cicatrices de Lily se convirtieron en un símbolo de esperanza e inspiración para otros que se enfrentaron a sus propias dificultades. La vieron como un testimonio vivo del hecho de que las cicatrices no definen a una persona; es su espíritu y resistencia lo que realmente importa.
Un día, una famosa galería de arte de la ciudad invitó a Lily a mostrar su trabajo en una gran exposición. Fue un sueño hecho realidad para ella. Mientras se paraba frente a sus pinturas, sintió una oleada de emociones. Vio a la gente moverse a las lágrimas, sus corazones conmovidos por su historia de superar la adversidad.
En ese momento, Lily se dio cuenta de que sus cicatrices no eran una carga sino un regalo, una marca única que la separaba y hacía que su viaje fuera aún más poderoso. Comprendió que su propósito no era sólo crear un arte hermoso, sino también inspirar a otros a abrazar sus propias cicatrices y encontrar la belleza dentro de sus imperfecciones.
A partir de ese día, Lily continuó pintando y compartiendo su historia con el mundo. Viajó a escuelas, hospitales y centros comunitarios, difundiendo un mensaje de resiliencia y autoaceptación. Sus cicatrices ya no eran una fuente de dolor; eran una fuente de fuerza y conexión.
El viaje de Lily tocó innumerables vidas, recordando a la gente que las cicatrices cuentan historias de supervivencia y coraje. Y mientras sonreía, con sus cicatrices mostradas con orgullo, sabía que había encontrado su verdadero propósito, ser un faro de esperanza para cualquiera que tuviera cicatrices, tanto vistas como no vistas.
Me encanto el dibujo, se ve estupendo.
Gracias