Así como lo son los apodos, las bromas en Colombia también están a la orden del día y creo que ellas elevan nuestro estado de ánimo, pero también suelen comportarse como una intromisión a la privacidad, a una obligación de tener que aceptar con humor fingido lo que nos quieren imponer, cosa que por supuesto está mal.
Yo también hago bromas, también me las han jugado a mí, lobo, pero siempre han sido estables en el marco del respeto. Aquí un tiempo estuvo de moda molestar a la gente asustándola, la mayoría de veces no pasaba nada, pero en otras, o bien los asustados terminaban con arritmias fuertes y desmayos, o bien los asustadores terminaban golpeados y agredidos de forma bien fea, como el caso del video que pudiste.
A veces las bromas no solo se convierten en un acto abusivo...
Gracias por la publicación, lobo. Muchos saludos a tu esposa y tus niños. Que Dios los bendiga grandemente 🤗🤗