Hello my beautiful people of Blurt, happy and blessed Tuesday, today with the best vibes for all of you, and may you continue doing well in whatever you are doing and growing positively.
Today I want to share with you a very nice story of a dog that is abandoned and arrives to a home of two older people who unknowingly adopt her and give her all their love even though this dog has a small condition, because you know true love does not see race or color, I hope you like it and enjoy it.
Lana could not hear the birds singing in the morning, nor the rustle of the leaves under her paws. She was a deaf dog, but her heart beat with a strength that compensated for any absence. She arrived at Doña Carmen and Don Pedro's house when she was just a puppy, a little ball of white fur like the full moon.
Doña Carmen and Don Pedro were two elderly people who had dedicated their lives to caring for animals. At first, they had a hard time communicating with Luna, but soon discovered that dogs communicate more with their hearts than with words.
Lana learned to understand her new owners' signals. When Doña Carmen pointed to the door, Luna knew it was time to go for a walk. When Don Pedro would wave a ball, Luna would excitedly run to fetch it. And when they both sat down on the sofa to pet her, Luna would fall asleep at their feet, purring softly.
Despite her disability, Lana was a dog full of life. She loved to play in the garden, chase butterflies and explore every corner of the house. The neighbors were surprised to see her so happy and playful. Some even called her “la perrita de la luna” (the moon dog) because her white fur shone in the night light.
Doña Carmen and Don Pedro realized that Luna had not only filled their house with joy, but also their hearts. Thanks to her, they had once again felt the emotion of caring for a living being and had learned to value every moment.
One day, Luna turned ten years old. Doña Carmen and Don Pedro organized a small party in the garden. They invited all their neighbors and friends to celebrate their beloved dog's birthday. Lana received many gifts and caresses, but the best gift was the unconditional love of her owners.
Lana lived many more years, always surrounded by the love of Doña Carmen and Don Pedro. And although she could not hear the sounds of the world, she could feel the love that surrounded her. And that, for her, was more than enough.
If you have reached this point, I thank you a world, hoping and wishing you liked the previous story, until next post, bye.
Translated with DeepL.com (free version)
ESPAÑOL
Hola mi gente bonita de Blurt, feliz y bendecido martes, hoy con las mejores vibras para todos, y me les siga yendo bien en lo que esten haciendo y creciendo positivamente.
Hoy quiero compartir con ustedes una historia muy bonita de una perrita que abandonan y llega a un hogar de dos personas mayores que sin saber la adoptan y le entregan todo su amor a pesar de ser esta perrita tener una pequeña condición, porque saben el verdadero amor no ve ni de raza ni color, espero os guste y disfruten.
Lana no podía oír los pájaros cantar por las mañanas, ni el crujido de las hojas bajo sus patas. Era una perrita sorda, pero su corazón latía con una fuerza que compensaba cualquier ausencia. Llegó a casa de doña Carmen y don Pedro cuando era solo una cachorrita, una bolita de pelaje blanco como la luna llena.
Doña Carmen y don Pedro eran dos personas mayores que habían dedicado sus vidas al cuidado de animales. Al principio, les costó comunicarse con Lana, pero pronto descubrieron que los perros se comunican más con el corazón que con las palabras.
Lana aprendió a entender las señales de sus nuevos dueños. Cuando doña Carmen señalaba la puerta, Luna sabía que era hora de salir a pasear. Cuando don Pedro agitaba una pelota, Luna corría emocionada a buscarla. Y cuando ambos se sentaban en el sofá para acariciarla, Luna se quedaba dormida a sus pies, ronroneando suavemente.
A pesar de su discapacidad, Lana era una perrita llena de vida. Le encantaba jugar en el jardín, perseguir mariposas y explorar cada rincón de la casa. Los vecinos se sorprendían al verla tan feliz y juguetona. Algunos incluso la llamaban "la perrita de la luna" porque su pelaje blanco brillaba bajo la luz de la noche.
Doña Carmen y don Pedro se dieron cuenta de que Luna no solo les había llenado la casa de alegría, sino también sus corazones. Gracias a ella, habían vuelto a sentir la emoción de cuidar a un ser vivo y habían aprendido a valorar cada momento.
Un día, Luna cumplió diez años. Doña Carmen y don Pedro organizaron una pequeña fiesta en el jardín. Invitaron a todos sus vecinos y amigos para celebrar el cumpleaños de su querida perrita. Lana recibió muchos regalos y caricias, pero el mejor regalo fue el amor incondicional de sus dueños.
Lana vivió muchos años más, siempre rodeada del cariño de doña Carmen y don Pedro. Y aunque no podía oír los sonidos del mundo, podía sentir el amor que la rodeaba. Y eso, para ella, era más que suficiente.
Si has llegado a este punto, te lo agradezco un mundo, esperando y deseando que el relato anterior te haya gustado, hasta próximos post, bye.
Es muy linda Lana. Shalom 🦋
Hola buenas noches, gracias por comentar.
¡En @team-mexico estamos agradecidos que formes parte de nosotros!
Contenido votado con cariño. ❤️
Recuerda que puedes publicar en nuestra comunidad
Vota al witness @cosmicboy123